Técnicas de Afrontamiento para la Ansiedad
Sentir ansiedad de modo ocasional es normal en la vida. Sin embargo, las personas con trastornos de ansiedad con frecuencia tienen preocupaciones y miedos intensos, excesivos y persistentes sobre situaciones diarias. Con frecuencia, en los trastornos de ansiedad se pueden presentar episodios repetidos de una ansiedad intensa, miedo o terror, los cuales pueden alcanzar un máximo en una cuestión de minutos (ataques de pánico).
Vivir con ansiedad puede hacerte ver los días más difíciles de lo que en realidad son. A continuación, te compartimos algunas técnicas que te pueden ayudar a reducir los pensamientos negativos y niveles de estrés y ansiedad.
Si estás constantemente preocupado/a, y la mayor parte del tiempo realmente no sabes por qué, intenta la siguiente técnica de afrontamiento.
1. Encuentra algo que te gusta hacer:
Hacer cosas que te generan placer es una excelente forma de dejar de pensar en aquello que te preocupa y ocupa tu mente. Es posible que hayas notado que te da ansiedad pensar en cosas que ni siquiera han ocurrido, por lo que tener actividades en tu vida que disfrutas, reduce el tiempo de preocupación. Encuentra algo que te permita liberar el estrés, que requiera toda tu atención y que te impida pensar en otras cosas.
2. Encuentra una forma física de liberar las tensiones:
Encontrar una forma en la que puedas físicamente descargar tus emociones te será de gran beneficio. Puedes intentar con un ejercicio en el que te imaginas que los pensamientos negativos salen físicamente de tu cerebro y flotan hacia el cielo. También puedes escribir en una hoja de papel la lista de pensamientos negativos que te consumen y de esa manera puedes sacar a la luz tus preocupaciones.
3. Comparte tus luchas con personas que confías:
Habla con algún familiar o ser querido. Si sientes que estos no te pueden brindar la ayuda y el apoyo que tu necesitas, considera hablar con un profesional de salud mental (un psicólogo, psiquiatra o consejero). La mayoría de las veces, el mero acto de hablar puede ser de gran ayuda para mejorar tu estado emocional. No tienes que enfrentarlo todo solo/a. Si entiendes que lo necesitas, busca ayuda.
4. Detente y enfócate en tu respiración:
A veces todo lo que hace falta es detenerse y concentrarse en la respiración. Existen múltiples ejercicios que puedes aplicar. Solo busca técnicas de respiración para calmarse, hacer este ejercicio te obliga a detenerte y concentrarte en tu respiración, lo que ha demostrado ser efectivo para reducir los niveles de estrés y ansiedad.
Si a pesar de estos consejos notas que no estás manejando efectivamente tus pensamientos y emociones, te recomendamos coordinar una cita con un profesional en el área de salud mental.
